Un lugar, por ejemplo, Madrid, es como una persona, tiene su propia alma. No se conoce un sitio sólo con datos históricos, artísticos o económicos. Contactamos con una ciudad cuando llegamos a comunicarnos con su esencia, y para ello utilizamos nuestros sentidos, ver, por supuesto, pero también tocar, oír, oler, saborear…
Para llegar a una experiencia plenamente satisfactoria tenemos que SENTIR ese lugar para llegar a apreciar su esencia.

Llevo toda mi vida “viajando” tanto por trabajo, en dedicación exclusiva como por placer, en mi tiempo de ocio. Afortunadamente la sociedad está regresando a su origen nómada y viajamos cada vez más.

Sabemos que viajar, tiene una gran capacidad de sanar, y por eso, también quisiera que lo aprovecháramos al máximo.

¿Por qué no hacemos que sea una verdadera iniciación?

Una nueva ruta personal puede ser el cambio que necesita tu verdadero ser. Quiero crear contigo un recorrido propio que te permita conocer aquello en lo que estás más interesado, uniendo la información con la experiencia sensorial. ¡Soy la persona que te va a acompañar en este recorrido! Juntos vamos a explorar un determinado lugar, como Madrid, mi ciudad o sus alrededores. Para empezar, nos pondremos en comunicación directa, así veremos si somos los compañeros adecuados. Después, vamos a planificar el encuentro, tu visita personalizada.

Quisiera que en esos momentos olvidemos un poco el teléfono, para poder disfrutar más de todo lo que vamos a conocer y sentir en ese lugar escogido. Dejemos nuestra “maleta” con todo su contenido y peso, a un lado, para poder disfrutar “a lo loco” de la magnífica experiencia de penetrar en un nuevo sitio, y ver que nos enseña sobre nosotros mismos.

Te propongo, entre otras muchas opciones dentro y fuera de Madrid que con sus mil caras te ofrece un mosaico de descubrimientos y experiencias que te cambiarán la vida.